Del manejo de suelo y agua al mercado de cafés especiales

Del manejo de suelo y agua al mercado de cafés especiales

Foto Cosecha Azul, CRS

-Escrito por Carlos Carbajal, coordinador de proyectos de ACUGOLFO en el departamento de Morazán, El Salvador-

Hoy queremos presentar en el blog la experiencia de Gilberto. Durante años fue nuestro campeón porque se esforzó en las mejores prácticas para el manejo de suelo y agua. En 2017, por fin vio recompensado su esfuerzo con el reconocimiento de sus buenas prácticas en el mercado; mediante un precio muy por encima del anterior.  Pero damos la palabra a nuestro protagonista, un caficultor salvadoreño en Arambala, Morazán:

He logrado ser un referente para el manejo de suelo y agua

“Mi nombre es Gilberto Benítez y he logrado ser un referente en el cultivo de café con buenas prácticas; pero estaba comenzando a desilusionarme. Para conocer cómo he conseguido levantar la producción, a pesar de la roya y los suelos pobres de esta tierra de pinares; mi cafetal -con algo más de 2 hectáreas-  ha sido continuamente visitado en los últimos tres años. A la finca han llegado grupos de productores desde varios lugares del país, e incluso de Honduras. El Centro Nacional de Tecnología Agropecuaria y Forestal (CENTA) en su División CENTA-CAFÉ, especializada en la atención técnica e investigación para la caficultura, escogió mi finca para sus escuelas de campo (ECA). Los productores vecinos también se han inspirado en lo que he desarrollado, sobre todo los aproximadamente 25 que formamos parte de la “Asociación ACDR”.

Logramos superar la crisis de la roya

“Hoy se puede ver cómo ha cambiado la zona. Ni se imagina cómo estaba cuando pegó duro la roya; pero la constancia y el esfuerzo de unos con el apoyo de algunas instituciones nos ha ayudado a ir renovando. Ahora es una alegría ver como todas esas nuevas plantitas ya están dando buena cosecha. También es una felicidad y orgullo que nuestras fincas estén repletas de obras de infiltración, cobertura de suelos y barreras vivas que permiten mayor salud en los suelos y la recarga hídrica de nuestras fuentes. La asistencia técnica de CRS y ACUGOLFO nos ha ayudado mucho.

“Les contaría todo lo que he hecho en la finca: desde viveros con diferentes variedades, injertos, diversificación con guineos, análisis de suelos, enmiendas y una apropiada fertilización, obras de conservación. Todo lo hice para lograr un buen manejo fitosanitario y lo propio que se debe hacer en una finca de café.

Antes ni siquiera sabía cuál era la calidad de mi café

“Ya con un buen manejo de finca, el 2014 empecé el nuevo reto de trabajar la postcosecha. Primero con una pequeña cama africana para no secar en el suelo, porque decían que se pierde la calidad. Y efectivamente comprobé la ganancia. Luego fui ampliando la cama africana y en 2016 Cosecha Azul me apoyó con la construcción de una cámara de secado solar de gavetas, que permite que el café se seque limpio, bajo condiciones de temperaturas controladas. También me asesoraron sobre cómo manejarla y la importancia de recolectar los granos maduros, sin verdes. Aprendí la medición de grados brix y el punto óptimo de maduración.

“La gran alegría fue comprobar que con ese cuidado en la cosecha y en el proceso de postcosecha con las cámaras de secado solar, la catación de mi café sacó mejores puntajes ¡Hasta 84-85 en la cosecha 2015-2016!. Era un café de estricta altura. Y pensar que yo, no mucho antes, ni sabía cuál era la calidad de mi café…

Pero tanto esfuerzo para no vender, no compensaba

Con esa noticia, pensé que ya la había hecho y que esta vez podría vender bien. Pero la desilusión fue ver que llegó el final de la temporada, y no había encontrado buen precio. Lo acabé reventando con un comprador local.

Entonces fue cuando comencé a desanimarme. Sí, mucho logro, mucho reconocimiento, mucha autosuperación… pero yo no vendía. Y tanto esfuerzo para no vender, no compensa; aunque uno sea consciente de todos los beneficios productivos conseguidos.
“Pero yo seguí trabajando la siguiente cosecha (2016-2017): cuidando aún más los procesos de postcosecha; innovando y probando entre honeys, naturales y semilavados. Y logré buenos puntajes en la catación; hasta un 86-87 con unos naturales. Aunque, siendo franco, a veces temía que acabaría como la temporada anterior.

No saben cómo se siente realizar la primera exportación y que le valoren a uno el café

“Afortunadamente los técnicos de Cosecha Azul, en una de sus visitas trajeron a Adam Klein, un comprador de Estados Unidos. Él conoció de primera mano la implementación de buenas prácticas de conservación en la finca; y la trazabilidad del café, producido con la innovación implementada para el secado uniforme del grano. Qué alegría cuando se ofreció a comprarme un microlote: los 135 kg que tenía… y que le pusiera precio. Acordamos $190 por quintal. De estos $190 que me pagó, $170 eran como si dijéramos el precio del café y los otros $20 son un sobreprecio que me abona este comprador por las Buenas Prácticas Agrícolas; porque allá donde ellos venden el café los compradores aprecian un café sostenible que conserva el suelo y el agua.

¡Un precio muy por encima de lo que antes había conseguido!  y $60 arriba del precio de bolsa de ese momento. Además, el comprador cubrió los costos del trillado y preparación para la exportación.

“Sé que podría haber pedido aún más, pero yo quería afianzar una relación comercial a largo tiempo que me permita la rentabilidad del cafetal. No saben cómo se siente realizar la primera exportación y que le valoren a uno el café.

“Unos meses después de la venta, y previo a la cosecha 2017-18, por el incremento de la producción, con el apoyo de Cosecha Azul construí nuevas camas africanas tipo túnel.

“Puedo decir ahora que la perseverancia y la paciencia pueden dar buenos frutos, pero que también se requiere la búsqueda de esos compradores que reconocen el resultado de un buen trabajo.”