Buenas prácticas Agrícolas para el manejo del frijol de postrera

Buenas prácticas Agrícolas para el manejo del frijol de postrera

-Texto y fotografías de José Cristóbal Escobar Betancourt, Coordinador ASA, El Salvador- Una de las buenas prácticas agrícolas para el manejo del frijol de postrera que se ha comenzado a implementar en el Programa ASA en El Salvador es el deshoje, despunte y dobla. La práctica consiste en que, al momento de la dobla del maíz, la planta se deshoja totalmente; luego se despunta, eliminándole el tercio superior, para realizarse seguidamente la dobla. Con esta práctica se tiene un mayor volumen de biomasa esparcida sobre el suelo, con lo que se logra una cobertura total de su superficie. 

 

Práctica tradicional de la dobla del maíz con buena cantidad de hojas adheridas a la planta

Práctica de deshoje, despunta y dobla, con una mayor incorporación de biomasa del maíz al suelo

 

 

 

 

 

 

 

 

 

De esta forma el suelo se protege del impacto de las gotas de la lluvia, reduciendo significativamente la erosión durante los meses de mayor precipitación en el País, que son agosto y septiembre. Con el aporte de más materia orgánica se mejoran las características físicas, químicas y biológicas del suelo.

 

Productor Hernán Cortez del municipio de Guaymango que ha comenzado a innovar con la práctica

Los suelos protegidos con el rastrojo reducen la incidencia y severidad de las enfermedades del frijol, especialmente la mustia hilachosa que es transmitida a través del salpique del suelo por el impacto de la gota de agua, disminuyen las pérdidas de agua por evaporación y escorrentía superficial, se mejora la infiltración y almacenaje de agua y decrece la vulnerabilidad ante los riesgos de sequía al presentarse periodos secos con escasa lluvia.

 

Ventajas adicionales de la practica son que la planta de maíz con menos biomasa/hojas en el tallo, se seca más rápidamente. De igual manera, por el despunte y deshoje, se reduce el grado de sombra para el cultivo de frijol, con lo que se aprovechan más eficientemente los rayos del sol para la fotosíntesis. Algunos productores ven con escepticismo la práctica debido a su creencia de que dificulta la germinación de la semilla y el manejo de la babosa del frijol (Vaginulus sp), por su hábito de esconderse en la basura. En estos casos, la demostración y capacitación para explicar su manejo ayuda a fortalecer el conocimiento de esta plaga y vencer los temores para realizar la práctica.