Una visión integral de la restauración del paisaje

Una visión integral de la restauración del paisaje

 

-Entrevista a Mayesse da Silva, especialista en suelos, CIAT- Hemos conversado con CIAT, el socio de Raíces Ahuachapán, sobre el concepto de restauración de paisaje con el que están trabajando en el proyecto. Pese a que estas observaciones provienen de una institución con vocación científica y de investigación, muchas de las apreciaciones que ponen sobre la mesa en esta entrevista tienen un vínculo mayor con el desarrollo integral de las comunidades rurales que con un progreso económico meramente productivo. Cedemos la palabra a nuestra colaboradora Mayesse Da Silva la palabra.

¿Qué entiendes por restaurar el paisaje?

Yo tengo una experiencia más limitada a los aspectos y la mirada biofísica, es decir, que estoy acostumbrada a utilizar información biofísica para interpretar si un paisaje está siendo restaurado. Sin embargo, en los trabajos en los que he venido colaborando con programas de desarrollo, he percibido que no sólo debemos hablar de la restauración de lo biofísico en el paisaje. Tenemos que incluir a las personas desde un principio. Porque, por ejemplo, en la comunidad colombiana con la que hemos estado colaborando en CIAT, la iniciativa que ellos llevan a adelante no estaba diseñada bajo el paraguas de la restauración de paisaje. Era una iniciativa que comenzó poco a poco, empezó muy chiquito; pero desde el principio se sintieron tan involucrados que, finalmente, ha funcionado y han tomado el relevo de la restauración. A mí me parece que esa es la razón por la que esto ha funcionado.

Para la restauración del paisaje, la comunidad debe adueñarse de la iniciativa

 En el programa de Colombia, ellos son los dueños de su iniciativa y por eso funciona. Hoy ya están llegando otros productores a sus comunidades y estos productores a otras zonas del país para que ellos muestren sus experiencias. No somos nosotros quienes estamos propagando las prácticas.

 Ayer discutimos sobre este concepto de paisaje en Raíces. El concepto de la forma en que lo vemos; cuya teoría de cambio vendría a ser, de manera resumida:  con buenas prácticas y conservación de los ecosistemas, aumentando los servicios ecosistémicos, podremos garantizar desarrollo humano.

 Sin embrago, en nuestra discusión estuvimos profundizando. Nos dábamos cuenta de que no queremos verlo como una cadena lógica, de causa y efecto. En realidad, no podemos asegurar que, si hacemos prácticas de conservación, mejoren los servicios ecosistémicos y logremos el desarrollo. Somos conscientes de que tenemos que traer a las personas desde el inicio, porque es junto con la comunidad como podremos lograr mejores prácticas.

 Las condiciones socioeconómicas y también las ecológicas serán las que restablezcan los servicios ecosistémicos

Y, en el mismo sentido, tampoco creemos que debamos limitarnos a evaluar únicamente los servicios ecosistémicos. No creemos que debamos estar pensando solo en cómo el medioambiente nos ofrece servicios ecosistémicos. Necesitamos pensar en restablecer las condiciones. Restablecer las condiciones socioeconómicas y también las ecológicas, que van a restablecer los servicios ecosistémicos. Este es el verdadero beneficio.

 Yo creo que sería esta la clave. Es imprescindible que, desde el principio, trabajemos con la comunidad, con la gente, de manera participativa; para que no sea que estamos imponiéndoles lo que tienen que hacer: “haga usted esta buena práctica”.

 Formar a la gente en evidencia

Tendríamos, además, que proponernos, como uno de nuestros principios, “formar” a la comunidad, pero “formarla en evidencia”. Es muy importante que construyamos la evidencia y el aprendizaje, porque tenemos que tener en cuenta a los agricultores y agriculturas. Y tenemos que tenerlos en cuenta, desde ahora, que estamos comenzando la planificación con los técnicos.

Para que un paisaje funcione hay que partir del conocimiento de los agricultores y comprender su lógica

Los agricultores tienen su conocimiento. Ellos llevan muchos años en sus fincas, las conocen. Ellos aprendieron de sus papás, de sus abuelos. Ellos saben cómo hacer muchas cosas. Tal vez no lo hacen de la mejor manera, pero esto ocurre siempre por alguna razón, por distintos factores que les hacen ver las cosas un poco diferentes.

Tenemos que entender estos factores para lograr tener un paisaje restaurado con los actores, con los protagonistas del paisaje. Y, con esto, generar una especie de combo que es cultural porque pertenece a la cultura de la comunidad. Si hay apropiación del enfoque de restauración en la comunidad, también las familias aprenderán que es importante, por ejemplo, cuidar de los ríos; o que es importante hacer una agricultura con un buen manejo eficiente y sostenible. Son cosas que, a menudo, hoy en día, la gente hace, aunque muchas veces no sepa por qué lo está haciendo. Al mismo tiempo, la comunidad también hace otras cosas que no son buenas; pero ellos tampoco son conscientes de que no son buenas.

Por todo esto, hay que trabajar de manera muy participativa, desde un principio. Y es importante mantener una comunicación constante, estar hablando con ellos, para comprender su lógica. Yo creo, de verdad, que el factor humano es clave para que un paisaje funcione.

Hay que contar con la comunidad desde el inicio para planificar

Mi experiencia con esta parte humana es más restringida. Yo tengo una preparación y una experiencia muy biofísica. Sin embargo, he participado en algunas cosas, por ejemplo, del trabajo con CIAT y he compartido y aprendido de mis colegas. Es importante ser participativo, desde el inicio, porque es importante la participación antes de planificar, cuando estamos planificando y cuando estamos tomando las decisiones de lo que vamos a hacer. Tenemos que escucharlos. Tenemos que aprender de ellos. Es imprescindible para saber cómo tenemos que hacer, para saber cómo lo hacen ellos, para conocer sus brechas, hasta dónde requieren ir, cuáles son sus aspiraciones. Hay que planificar con ellos y hacer las cosas de una manera mejor. Yo creo que es interesante mostrarles lo que estamos pensando, para que enriquezcan nuestra propuesta. Me parece muy interesante. Hay metodologías para hacer esto. CIAT tiene una larga experiencia en estas metodologías que podríamos adaptar.