-Escrito por Mar Martín- Estas fueron las palabras de Alfredo Castro el primer día que conversamos en Managua. Y creo que resumen su actitud como extensionista. Sus éxitos en el programa ASA demuestran que merece la pena escucharlo y por eso queremos compartir hoy esta conversación en el blog, para reflexionar juntos sobre lo que hacemos y cómo lo hacemos.
“Mi proceso ha sido pasar de agricultor a técnico y después de técnico pasé a dar clases en la universidad. Me acostumbré a preguntarle al que sabía más y al que sabía menos y a preguntarle hasta al que no sabía leer. Yo comprendí que yo podía aprender más, y aprender de metodología. Aprendí a bajarme al nivel del productor; pero eso no significa que yo no pueda hablar con el ingeniero. Por qué, porque yo fui quemando todas las etapas.”
Trabajar participativamente y trabajar a demanda
Lo más importante es que estamos trabajando el suelo, que es la base para la producción. Y lo más importante sería que trabajemos el suelo en conjunto con los productores y productoras, que sea un proceso participativo de verdad. Porque a veces decimos «participación» porque el productor «dijo» pero a veces no tiene razón. Yo también puedo aportar, y muchas veces son cosas de aclarar. Lo que hablábamos ayer de trabajar con la demanda, se refería a la demanda explícita, la que te dicen ellos. Pero hay una demanda implícita que no te expresan, por ejemplo: que tienen que manejar cobertura para tener más agua; que muchas veces las propiedades químicas del suelo como el ph no son las más adecuadas. Son cosas que ellos no conocen. No conocen de nutrición. No conocen de análisis de suelo, cómo interpretarlo. Pero alguna forma hay para poder discutir con ellos sobre el análisis de suelo, que entiendan cuál es la función de cada uno de los elementos y por qué es importante que los tengan; y que logremos de repente elevar los rendimientos, pero además aumentar la materia orgánica, para que la cantidad de fertilizante sea menor y lo puedan ellos comprar (porque ahora es caro). Si yo calculo el fertilizante por manzana, son un montón de quintales. Pero si los rendimientos suben con ese fertilizante; quizá les va a dar dinero para comprar fertilizante, y que tengan comida, y que también los ingresos sean mayores.
Mantener la humedad del suelo ha motivado a las familias
Otra cosa importante en el proyecto es que uno espera que, agregando cobertura, la humedad se mantenga. Y lo más interesante es que hay datos, tomados en marzo o abril, para ver la cantidad de humedad que había, comparando las dos parcelas (la parcela con cobertura y la parcela testigo, sin cobertura). Y hay unas diferencias que nos ayudan a reflexionar con la gente: que ellos están cosechando agua, pero no en un tanque sino en toda la parcela que tiene cobertura. Ya los promotores y productores les presentaron esos datos a otros productores de otras comunidades y les gustó bastante porque ya no están viendo que estoy siendo yo quién presenta la información, y estamos provocando la reflexión y aprendizaje horizontal, y ellos están convenciendo a otros productores.
La limitante más importante para la práctica de cobertura permanente
Sin embargo, la limitante para incorporar cobertura en las comunidades es que tienen ganado. Aunque tampoco es una limitante tan fuerte, porque miramos que en dos parcelas donde la gente metió algún burro en realidad no le había quitado el montón de cobertura, se habían comido la hoja pero la mayoría de la cobertura permanecía.
Coberturas y abono verde
En esto de la cobertura, lo principal es que tengo que mantener cubierto el suelo con una cobertura vegetal. Cuál cobertura vegetal: la que se me adapte mejor a la zona. Yo ya meto frijoles nativos. Hay caupí, hay un frijol lima. Para la sequía son increíbles y lo utilizo como abono verde y también para comer; porque si les meto canavalia, las parcelas son pequeñas y les quito el espacio. Nosotros promovemos canavalia; pero hay otros frijoles que son nativos de la zona, se adaptan a la sequía y se acompañan muy bien con los otros cultivos. Ayuda bastante la canavalia para producir más alimento. La canavalia te puede dar para producir semilla pero la semilla es tóxica para uno; mientras que del otro se la pueden comer.
Trabajar con frijoles nativos
Nosotros con estas comunidades ya estamos en una etapa diferente. Ahora la idea es introducir en la mayor cantidad de parcelas estos frijoles, que son indeterminados y a la vez que agrega cobertura, queda algo de nitrógeno; pero también pueden mejorar con el tiempo los ingresos. Ellos siembran maíz, millón, frijol de primera; pero de postrera, cuando siembran millón, ese terreno se queda solo con el millón. Les meto este frijol y aprovecho para proveer alimento y prácticamente lo que hace es trepar en el millón: entonces les sirve de soporte y echa una gran cantidad de cosecha. Les podemos doblar o triplicar el rendimiento en frijoles. Ahora está el reto de buscarle mercado, transformarlo. No les he dejado que se lo coman porque, si no, no van a tener para semillas. Y ese millón también da a los seis meses, entonces prácticamente son compañeros y se complementan y, a la vez, lo que le va a dar al millón es nutrientes, especialmente nitrógeno que se fija por la raíz y lo pueden compartir.
Utilizo el frijol lima o chinapopo. Lo siembro de primera pero cada 3 metros, porque he visto cómo crece a los lados y me puede afectar al maíz. A lo mejor es un experimento que hay que hacer con ellos a una y otra distancia. Hay otra variedad que da su cosecha a los seis meses. Entonces, cuando con los otros de ciclo corto no llueve mucho de primera, no tienen comida; pero como este es indeterminado puede esperar a que de postrera llueva y va para arriba con poca agua. Las mujeres son las que lo impulsan porque les gusta hacer una comida de vez en cuando con él y lo guardan. Estos frijoles aguantan sequía, pero al mismo tiempo va aumentando el nivel de cobertura. El nitrógeno lo aporta la raíz que se queda ahí. La idea es acelerar la descomposición del resto de la cobertura y por otro lado es garantizar la seguridad alimentaria. La verdad es que, como ellos ya trabajaban con estos frijoles, lo han aceptado bien.
Tenemos comunidades “modelo”
Tenemos calculado que estas comunidades tan avanzadas son el modelo que podemos seguir para que las otras puedan ir detrás. Un 98 % tiene cobertura para proteger la humedad y nutrir el suelo, un frijol que sirva para comer y también que lo puedan vender. Ellos lo han comido siempre, por eso es la mujer la que lo conserva. Para mí es como una seguridad alimentaria que ellos hacen. Ya lo tienen probado: con poca o con bastante lluvia dan frijoles. Son variedades nativas. La diferencia es que es más largo el ciclo y, si no llovió mucho de primera, espera la lluvia de postrera. Te puede esperar más tiempo. Él va acumulando esa humedad, hace un buen órgano de reserva de nutrientes y con eso en periodo seco puede pasar verde y floreciendo. Tenemos unas fotos a pleno verano, en el mes de marzo, lo comimos. Ese es el chinapopo. El otro no te va a dar en verano, pero en el periodo que hay humedad él te puede dar una gran cosecha, incluso aunque sea seco. Además no es tan perenne porque puede pasar incluso que lo sembraste este año y a los 3 o 4 años volver a sembrar porque él vuelve a rebrotar. Él no se muere, vuelve a recrecer, para zona seca qué querés mejor.
Esto son cosas que saben los agricultores, están ahí, como ocultas. Uno como técnico puede no darse cuenta; pero, si lo relacionas, cumplimos con los objetivos de la investigación y cumplimos con nuestros productores y productoras. Lo más importante es el aprendizaje de todos.